Seguramente te ha pasado alguna vez que te metes en un proyecto muy grande, que exige una gran cantidad de recursos tanto financieros como de tiempo. Esos proyectos molan mucho, pero llega un momento donde te puedes encontrar en un punto donde todo se te queda todo muy grande o se complica demasiado y no llegas a ver el final nunca. De hecho lo más probable es que no lo termines y quede abandonado. Hace ya meses que James Bruton se ha embarcado en construir un robot cuadrípedo llamado Open Dog y desde luego no es moco de pavo. Aún así y debido a que "solo" le falta hacerlo caminar correctamente, ha sacado tiempo de donde no existe para construir otra pequeña réplica con otro sistema diferente en las patas como prueba de concepto. Su objetivo actualmente es poder darle escobazos a lo Boston Dynamics y que se mantenga de pie, casi nada. Quizás algún día llegue a bailar como Spot Mini, quién sabe. De esa forma puede mejorar todo el sistema para finalmente implementarlo en su robot principal Open Dog.