En los tiempos en los que estamos, los eventos presenciales escasean por razones obvias y para la comunidad Maker genera todo tipo de problemas, pero también a las escuelas. Las competiciones de robótica eran una parte fundamental del aprendizaje de los alumnos además de reformar los lazos humanos entre ellos.
Lamentablemente ahora la cosa está complicada. Sin embargo el MIT ha desarrollado una serie de metodologías para poder realizar competiciones de robótica a distancia intentando preservar de la mejor forma posible los vínculos humanos.
Ahora los alumnos reciben todo el material en su casa para poder trabajar en sus robots y curiosamente han descubierto que en éste año, el primero que se hace de ésta forma, los robots tienen un nivel más alto y los participantes son mucho más productivos.
Principalmente por que los alumnos pueden desarrollar y mejorar sus técnicas en su propia casa, con sus herramientas en un entorno familiar. y conocido. Evitando la fricción de ir al centro o a un fablab donde hay más gente, más ruido etc y quizás algunos alumnos, especialmente los más reservados, no se encuentren cómodos para desarrollar sus proyectos.
En su propia casa, en el garaje, en su habitación o en la cocina, los alumnos pueden dar rienda suelta a su imaginación y trabajar todas las horas que necesiten, a cualquier hora, para terminar su robot. Eso produce un incremento muy importante en la productividad y la aceleración del aprendizaje, que es de lo que se trata.
¿Puede el mundo virtual simular el factor humano que aportan las competiciones presenciales?
En el vídeo que os dejo a continuación podrás ver cómo lo han hecho en el MIT, con una organización y estructura que no pasa desapercibida.