Aunque el consumo de una Raspberry Pi es muy pequeño, siempre estamos condenados a conectarla a un enchufe de corriente, sin embargo y precisamente debido a su bajo consumo, se puede alimentar utilizando la fuente de energía más abundante que tenemos: El Sol.
En este vídeo que os dejo a continuación se muestra como montar un pequeño sistema basado en una placa solar y una batería para alimentar la Raspberry Pi. Es bastante sencillo de hacer y es estupendo para sondas o montajes que necesiten estar lejos de cualquier toma de corriente en exteriores.