La estupenda idea que tuvo Xonay es basarse en un mueble cuadriculado de IKEA para añadirle funcionalidades interactivas para su hijo. Se trata de un panel de control que aunque realmente no controla nada, está lleno de luces y colores. Dispone de varios pulsadores, un encoder que se puede girar y LEDs, muchos LEDs. La realización y documentación que hizo Xonay es estupenda y lo ha dejado en su web en todo detalle. También ha utilizado una Raspberry Pi con una pequeña pantalla LCD para dar un toque final. El vídeo de presentación que os dejo a continuación no tiene desperdicio.
Enlace: Activity Board